Control del rendimiento de los empleados: 6 métodos eficaces
El rendimiento de los empleados es la base de cualquier empresa que quiera seguir siendo competitiva. Los empleados de alto rendimiento aumentan los beneficios y la satisfacción de los clientes, creando una imagen positiva de la empresa.
Supervisar el rendimiento de los empleados es esencial para comprender las contribuciones individuales, identificar las áreas de mejora y recompensar a los que más rinden. Las medidas oportunas para apoyar la productividad son la clave para ayudar a cada empleado y a la empresa a revelar su verdadero potencial. Sin embargo, rendimiento es un término amplio; su significado puede variar en función de la organización, el campo y el puesto. ¿Qué debe evaluar exactamente un directivo y cuál es la mejor manera de hacerlo? Responderemos a estas preguntas en este artículo.
¿Cómo se mide el rendimiento de los empleados?
Según la interpretación tradicional, el rendimiento de los empleados es la calidad, la eficiencia y la cantidad de trabajo producido.
Calidad
Para evaluar la calidad del trabajo, debe comprobar si el trabajo del empleado cumple las expectativas y las normas del sector o de la empresa. Comprueba si el empleado ha cumplido sus objetivos y ha hecho todo lo posible mientras trabajaba en la tarea. Dependiendo del campo y del puesto, las métricas cualitativas pueden ser:
Satisfacción del cliente: lo satisfechos que están los clientes con el trabajo del empleado; lo bien y rápido que el empleado atiende sus peticiones; si el empleado sigue el código de conducta, etc.
Trabajo en equipo y colaboración: lo bien que el empleado trabaja con los demás, contribuye a los objetivos del equipo y apoya a sus colegas.
Iniciativa: si el empleado es capaz de asumir nuevas tareas, proponer nuevas ideas y resolver problemas de forma independiente.
Adaptabilidad: la flexibilidad del empleado para afrontar situaciones cambiantes y nuevos retos.
Comunicación: la eficacia con la que el empleado puede comunicarse con compañeros, clientes y directivos.
Cantidad
La cantidad se refiere a la producción del empleado: el número de artículos producidos. Puede parecer que la cantidad sólo puede medirse en la fabricación, pero en realidad puede referirse a cualquier artículo, incluidos los no materiales: ventas generadas, proyectos finalizados, llamadas realizadas, etc.
Eficacia
La eficiencia mide la rapidez y eficacia con que se realizan las tareas, como el tiempo por unidad producida o el tiempo de respuesta del servicio de atención al cliente. Se refiere al cumplimiento de los plazos, la realización de las tareas a tiempo sin sacrificar la calidad y la utilización de los métodos más eficientes para alcanzar los objetivos de trabajo. La eficiencia puede medirse en:
Artículos producidos/tareas realizadas por hora/día/mes;
Tiempo de inactividad de la máquina: el tiempo que el equipo no está operativo debido a mantenimiento, averías u otros problemas;
Consumo de materiales y residuos: cantidad de materiales o suministros que se utilizan o desechan;
Duración del ciclo: el tiempo que se tarda en completar un proceso de principio a fin;
Defectos por unidad: número de errores o defectos detectados en una unidad de producción.
Compromiso
Muchas organizaciones modernas priorizan el bienestar y el compromiso de los empleados junto con las métricas tradicionales. Este enfoque es razonable. Los empleados poco comprometidos faltan al trabajo con más frecuencia, son improductivos y afectan negativamente a sus compañeros y clientes. Esto cuesta a las empresas alrededor de 34% del salario anual de dicho empleado o 450-550.000 millones de dólares al año sólo en Estados Unidos. Por el contrario, los equipos altamente comprometidos muestran un 23% más de rentabilidad.
A la hora de medir el compromiso, los directivos pueden fijarse en:
Satisfacción general en el trabajo;
Satisfacción de los empleados con su conciliación de la vida laboral y familiar;
Percepción de los empleados de las oportunidades de crecimiento y carrera dentro de la empresa;
Satisfacción con la cultura de la empresa;
Rotación voluntaria/involuntaria;
Absentismo.
Otras métricas de rendimiento
Además de la cantidad, la calidad, la eficacia y el compromiso, puede que merezca la pena fijarse en las métricas de comportamiento que también pueden afectar al rendimiento:
Ética de trabajo: la dedicación, el compromiso y la profesionalidad del empleado.
Asistencia y puntualidad: the employee's reliability and adherence to work schedules.
Conformidad: el cumplimiento por parte del empleado de las políticas, procedimientos y reglamentos de la empresa.
6 formas de controlar el rendimiento de los empleados
Revisiones periódicas del rendimiento
La evaluación del rendimiento es un proceso sistemático de evaluación del rendimiento de los empleados en relación con objetivos y expectativas predeterminados. Es un método estupendo para debatir los logros, revelar áreas de mejora y establecer nuevos objetivos.
Las revisiones del rendimiento requieren una preparación exhaustiva. Empiece por fijar expectativas claras: describa las responsabilidades y las expectativas de rendimiento y establezca objetivos claros y mensurables. Supervise el rendimiento de los empleados durante un periodo determinado y recopile métricas cuantitativas y cualitativas. Los comentarios de jefes, colegas y clientes serán una valiosa contribución al panorama general del rendimiento.
Durante la revisión, procure crear un ambiente cómodo y abierto para el debate. Ofrezca tanto refuerzos positivos como comentarios constructivos sobre los aspectos que pueden mejorarse. Sea específico: proporcione ejemplos que respalden sus comentarios. Anime al empleado a compartir su punto de vista y sus preocupaciones. Al final de la revisión, elabore un plan para abordar los problemas de rendimiento y las áreas de mejora.
Las evaluaciones del rendimiento son eficaces si se realizan con regularidad. Sin embargo, 69% de las empresas las organiza solo una o dos veces al año, lo que apenas es suficiente.
Controles individuales
80% of employees preferirían recibir información periódica en lugar de revisiones anuales. Los "check-ins" individuales son una forma estupenda de llenar el vacío entre las revisiones del rendimiento y mantenerse al día del flujo de trabajo. Mientras que las revisiones del rendimiento se centran principalmente en el rendimiento pasado y abarcan periodos más largos, las comprobaciones sirven para mantener una comunicación regular y asegurarse de que todo va por buen camino. Suelen ser más frecuentes, semanales o quincenales, y más informales. Los check-ins se centran en proyectos concretos, abordan las tareas cotidianas y ofrecen apoyo puntual.
Software de control de empleados
El software de supervisión de empleados es una valiosa herramienta para controlar el rendimiento. Recopila datos exhaustivos sobre el uso del ordenador por parte del empleado, lo que permite ver a dónde va el tiempo de trabajo y cómo se utilizan los recursos de la empresa, para garantizar el cumplimiento de las políticas de la empresa y reforzar la seguridad.
Los programas de control de empleados recopilan y analizan los datos de actividad y los presentan en forma de gráficos de tendencias de productividad, asistencia y uso de software e Internet. Las herramientas avanzadas ofrecen funciones adicionales, como la transmisión en directo de las pantallas de los empleados, lo que permite ver en qué están trabajando. CleverControl, el software líder para supervisar el rendimiento de los empleados, ha introducido recientemente AI Scoring. El algoritmo basado en IA analiza la actividad del empleado, la compara con los estándares del sector, calcula una puntuación de productividad individual y ofrece recomendaciones.
El software de control de empleados ahorra mucho tiempo y esfuerzo a los directivos. En lugar de revisar manualmente los informes de rendimiento y asistencia, pueden obtener estadísticas con un clic del ratón. Gracias a su funcionalidad global y a su análisis en profundidad, estos programas pueden utilizarse para supervisar el rendimiento de los empleados por sí solos o en combinación con otros métodos. Por ejemplo, la información recopilada puede utilizarse para las revisiones anuales del rendimiento. El software de seguimiento de empleados puede utilizarse para recopilar métricas cualitativas y de eficiencia y para evaluar el compromiso de los empleados.
La implantación de un software de supervisión de empleados exige transparencia y respeto de la privacidad. Utilícelo para medir la productividad e identificar áreas de mejora. Recopile sólo los datos estrictamente necesarios y garantice el cumplimiento de las leyes y normativas aplicables. Se recomienda notificar a los empleados la monitorización y explicarles los fines de la misma para evitar crear presiones innecesarias y problemas de confianza.
Software de gestión de tareas
El software de gestión de tareas es otra herramienta valiosa para el seguimiento del rendimiento. Mientras que los programas de seguimiento de empleados controlan la actividad general de los empleados, el tiempo inactivo/activo y las distracciones, los gestores de tareas se centran en proyectos y tareas específicos. Estos sistemas pueden supervisar el progreso de las tareas de los empleados, lo que le permite identificar posibles problemas a tiempo y proporcionar la ayuda oportuna. Podrá ver cuánto tarda un empleado en terminar la tarea, realizar un seguimiento del progreso de los empleados y hacerles responsables del cumplimiento de los plazos. Puede vigilar la carga de trabajo de cada empleado, redistribuirla uniformemente entre el equipo y revelar quiénes son los empleados con mejor rendimiento y quiénes tienen dificultades.
El software de gestión de tareas funciona bien para recopilar métricas de rendimiento cuantitativas, cualitativas y de eficiencia. Para sacar el máximo partido de estas herramientas, establece objetivos claros y alcanzables para cada empleado, haz un seguimiento de los progresos y proporciona retroalimentación oportuna.
Revisiones inter pares
Las evaluaciones entre compañeros consisten en obtener comentarios sobre el rendimiento de un empleado por parte de sus colegas. Dichas evaluaciones complementan la opinión de jefes y subordinados y ofrecen una perspectiva diferente y valiosa. Además, los empleados pueden sentirse más comprometidos y valorados cuando sus compañeros participan en la evaluación de su rendimiento.
Para fomentar una retroalimentación sincera, asegúrese de que las revisiones sean anónimas y se centren en habilidades y comportamientos específicos relevantes para la función del empleado.
Autocontrol
Implicar a los empleados en la evaluación de su rendimiento es un valioso método de control. Fomenta la responsabilidad, mejora el compromiso y muestra una perspectiva única. Los empleados tienen la oportunidad de expresar sus opiniones sobre su rendimiento, tareas, compañeros, posibles preocupaciones y sugerencias.
La autoevaluación puede ayudar a los empleados a conocer mejor sus puntos fuertes y débiles. Incluso puede aumentar la productividad: es más probable que los trabajadores alcancen sus objetivos cuando hacen un seguimiento activo de sus progresos y se adaptan según sea necesario.
Entonces, ¿cuál es la mejor manera de controlar el rendimiento de los empleados?
Adaptar la estrategia de control del rendimiento de los empleados a las necesidades específicas de su empresa es crucial para lograr resultados óptimos. Existen varios métodos, pero el más eficaz suele ser una combinación de técnicas.
Aprovechando el poder de las revisiones periódicas del rendimiento, los controles individuales, el software de seguimiento de empleados, las herramientas de gestión de tareas, las revisiones entre compañeros y el autocontrol, puede crear un sistema integral que apoye el desarrollo de los empleados, fomente un entorno de trabajo positivo e impulse el éxito general de la empresa.