Mejorar la motivación: El sorprendente papel de la supervisión de los empleados
La motivación es uno de los factores clave que afectan a la productividad de los empleados y, en consecuencia, al éxito de la empresa. Los resultados de la metaanálisis realizado por Gallup muestran que las empresas con una plantilla muy comprometida son un 21% más rentables y un 17% más productivas que las que tienen empleados no comprometidos. Los empleados motivados también son 87% menos probable Por eso los directivos buscan constantemente diversas formas de aumentar la motivación de los empleados. Los métodos de motivación suelen asociarse a primas materiales, pero, en realidad, hay otras formas igualmente eficaces de subir la moral.
Una de las opciones inesperadas es la supervisión de los empleados. Además de su finalidad directa, puede ser una gran herramienta para mejorar la motivación. ¿Cómo? Explorémoslo en este artículo.
¿Qué factores impulsan la motivación de los empleados?
En primer lugar, aprendamos cómo funciona la motivación. La motivación es una compleja interacción de varios factores, tanto internos como externos. Entre los factores internos figuran:
Un sentido de propósito. Es más probable que los empleados estén motivados cuando saben que su trabajo tiene sentido y contribuye a los grandes objetivos de la empresa.
Autonomía. Los empleados quieren tener el control sobre su forma de abordar las tareas y la oportunidad de tomar decisiones.
Retos intelectuales. Las tareas que ponen a prueba las habilidades y conocimientos de los empleados son grandes motivadores.
Dominio. Para algunos empleados, su deseo de superarse y alcanzar objetivos profesionales puede ser una gran motivación.
Los factores externos son:
Compensaciones y prestaciones. Las primas, los salarios justos y las prestaciones competitivas son algunos de los mayores incentivos para la mayoría de los trabajadores.
Reconocimiento. Reconocer y celebrar los logros de los empleados, tanto los grandes como los pequeños, puede elevar significativamente la moral.
Expectativas y objetivos claros. Unos objetivos y expectativas claramente definidos proporcionan un sentido de dirección y propósito.
Ambiente de trabajo positivo. Los empleados pasan la mayor parte del día en el trabajo. Un entorno negativo puede afectar a su estado de ánimo, provocar aislamiento y dificultar la satisfacción en el trabajo. Con el tiempo, la motivación de los empleados se degradará en tales condiciones.
Relación con directivos y líderes. Las relaciones basadas en la confianza mutua ayudarán a los empleados a expresar abiertamente sus necesidades y dificultades laborales. Esta franqueza ayudará a los directivos a proporcionar el apoyo necesario y a encontrar los métodos adecuados para motivar al equipo.
Oportunidades de formación y aprendizaje. La mayoría de los empleados quieren desarrollar todo su potencial. Darles oportunidades de crecer profesionalmente mejorará la motivación de los empleados, especialmente los de la Generación Y.
Ahora que hemos explorado los factores clave de la motivación de los empleados, profundicemos en cómo puede emplearse estratégicamente la supervisión de los empleados para amplificar estos factores.
Cómo la supervisión de los empleados puede mejorar la motivación en el lugar de trabajo
En primer lugar, es importante señalar que el seguimiento de los empleados sólo beneficiará a la productividad y motivación de su equipo si se aplica de forma abierta, transparente y respetando la privacidad de los empleados. Utilizar software de seguimiento en secreto minará la confianza de los empleados y arruinará su moral.
He aquí cómo el uso ético de la supervisión puede mejorar la motivación.
Supervisarse a sí mismo para aumentar la motivación
La psique humana está intrínsecamente influida por estímulos externos. Sabiendo que sus actividades laborales están supervisadas, los empleados se sentirán motivados para priorizar sus responsabilidades laborales directas y gestionar su tiempo de trabajo de forma más eficaz.
Ser consciente de la vigilancia fomenta la autodisciplina y ayuda a resistir comportamientos impulsivos, como el impulso repentino de comprobar los mensajes entrantes en Facebook o las novedades en la tienda online favorita.
Sin embargo, los empleados deben entender cómo juzga usted determinadas actividades o periodos activos/inactivos en el trabajo; de lo contrario, pueden sufrir estrés y descuidar los descansos necesarios para seguir siendo "productivos".
Fomentar la autonomía y el afán de superación
A primera vista, el seguimiento puede parecer contrario a la autonomía y vagamente relacionado con el deseo de superación. Sin embargo, si los empleados tienen acceso a los registros de seguimiento y a las puntuaciones de productividad, pueden comprender mejor sus pautas de trabajo y esforzarse por ajustarlas para ser más eficientes.
Al ver cómo mejora su puntuación de productividad y el número de tareas completadas, los empleados experimentarán satisfacción al alcanzar los objetivos y se sentirán inspirados para ir más allá.
Evaluación justa del rendimiento
Las evaluaciones manuales del rendimiento suelen ser subjetivas y sesgadas. Los directivos pueden apuntar involuntariamente a algunos empleados y restarles importancia por motivos personales. Por ejemplo, pueden creer inconscientemente que esos trabajadores son "vagos" o "antipáticos" o discriminarlos por su sexo o sus creencias. Al mismo tiempo, el alto rendimiento de otros empleados suele pasar desapercibido, lo que acaba provocando su frustración y su búsqueda de otro lugar donde se reconozca su aportación.
El software de seguimiento de empleados elimina estos prejuicios. Un análisis objetivo de la actividad de cada empleado revela a aquellos cuyo rendimiento supera sistemáticamente las expectativas. De este modo, pueden recibir el reconocimiento que merecen y obtener un impulso de motivación.
La supervisión de los empleados también puede utilizarse para identificar a los empleados con dificultades. El software recopila información como el tiempo de inactividad, la baja productividad y las consultas de búsqueda relacionadas con el trabajo. Los directivos pueden analizar esta información no sólo para identificar a los trabajadores con problemas, sino también las áreas específicas en las que tienen dificultades. Este enfoque específico permite a los directivos proporcionar asistencia oportuna y eficaz, ayudando a los empleados con bajo rendimiento a mejorar su rendimiento y alcanzar todo su potencial.
CleverControl, la solución avanzada de supervisión de empleados, ofrece una función innovadora para mejorar la productividad y la motivación: la puntuación de IA. El potente motor de IA evalúa automáticamente la actividad de cada empleado según los estándares de su campo y puesto, calcula las puntuaciones de productividad individuales y proporciona aclaraciones. Esta función señala rápidamente los puntos débiles y facilita las evaluaciones del rendimiento. Más información sobre AI Scoring en este artículo.
Programas de aprendizaje y formación específicos
Un seguimiento exhaustivo de la actividad de los empleados puede revelar deficiencias en el rendimiento individual y poner de relieve áreas en las que los empleados necesitan formación adicional. Por ejemplo, un empleado puede tener problemas con un software concreto o incumplir constantemente los plazos de entrega. Cuando los responsables se enteran de estos cuellos de botella, pueden ofrecer formación específica sobre la gestión del tiempo o el uso de esa aplicación.
Adaptar los programas de formación a las necesidades específicas de cada empleado maximiza su eficacia en cuanto a crecimiento profesional y motivación. Cuando los empleados sienten que aprenden y crecen constantemente, es más probable que estén motivados, confíen en sí mismos y se sientan satisfechos con su trabajo.
Conclusión
Para crear un sistema de motivación realmente eficaz, los directivos deben conocer los factores que impulsan la motivación y que funcionan para sus empleados. La supervisión de los empleados, cuando se aplica de forma ética y abierta, no sólo puede amplificar estos factores, sino servir de motivador en sí misma.
La supervisión de los empleados puede mejorar la motivación al fomentar el sentido de la responsabilidad del trabajador y su deseo de crecer profesionalmente. Proporciona información valiosa sobre las pautas de trabajo, lo que permite a los empleados conocer sus puntos fuertes y débiles y mejorar su rendimiento. Esta información no es menos práctica para los directivos, ya que les permite reconocer a los trabajadores de alto rendimiento, identificar los procesos de trabajo ineficaces y las lagunas de conocimientos, y proporcionarles apoyo específico.
Utilizando la supervisión de los empleados como herramienta de seguimiento del rendimiento y la motivación, las empresas pueden crear una plantilla más motivada, comprometida y con más éxito.