Inteligencia artificial en la supervisión de empleados: El futuro ya está aquí

El espacio de trabajo moderno está cambiando hacia modos de trabajo más flexibles y remotos, lo que requiere nuevos enfoques para el seguimiento del tiempo y la productividad. Los antiguos métodos de seguimiento ya no son eficaces, y aún quedan por descubrir y probar otros nuevos.
La Inteligencia Artificial (IA), el último avance tecnológico, ha demostrado una eficacia increíble en muchas esferas de la vida, incluida la supervisión de los empleados. Esta tecnología del futuro ya está transformando la supervisión del rendimiento, el seguimiento del tiempo y la toma de decisiones, y tiene un gran potencial para hacer aún más.
La IA y sus aplicaciones en la supervisión de empleados
Diversas industrias implementan la IA en la supervisión de los empleados para realizar un seguimiento de la productividad, garantizar el cumplimiento de las políticas de la empresa y mejorar la seguridad.
Aumento de la productividad
Una de las mayores ventajas de la IA en la supervisión de empleados es su capacidad para procesar grandes cantidades de datos mucho más rápido que una persona. Mientras que un directivo humano pasa horas revisando informes de productividad, indicadores clave de rendimiento y hojas de horas trabajadas, la IA analiza estos datos y los compara con parámetros de referencia específicos del sector y de la función en cuestión de minutos. Puede ofrecer evaluaciones de rendimiento personalizadas y señalar puntos débiles y áreas de mejora. Los sistemas de control del tiempo basados en IA pueden supervisar las horas de trabajo y el tiempo dedicado a proyectos y tareas. La IA puede entrenarse potencialmente para poner de relieve los recursos infrautilizados e incluso predecir posibles retrasos en los proyectos y excesos presupuestarios.
Mayor compromiso y bienestar de los empleados
Además de seguir y evaluar el rendimiento, la IA puede ayudar a aumentar el compromiso y el bienestar de los empleados. Por ejemplo, puede analizar los patrones de trabajo, actividad y comunicación y detectar los primeros signos de agotamiento o falta de compromiso. Estos signos pueden ser un descenso de los niveles de actividad, declaraciones negativas, un aumento del tiempo dedicado a realizar tareas habituales o cambios en el horario de trabajo: salidas tempranas o quedarse hasta tarde en el trabajo. La IA en la supervisión de los empleados puede detectar estos cambios sutiles y alertar a los directivos. A su vez, los directivos pueden proporcionar proactivamente apoyo adicional, ajustar las cargas de trabajo u ofrecer programas de formación.
Reducción de los riesgos de seguridad
Los sistemas de supervisión basados en IA pueden entrenarse para identificar riesgos de seguridad, como filtraciones de datos, amenazas internas y fraude. Al igual que la supervisión del sentimiento y los patrones de actividad, la IA puede analizar los informes de actividad de los empleados en busca de anomalías, como intentos inusuales de inicio de sesión, descargas de archivos sospechosos o accesos no autorizados a datos confidenciales. Si detecta un comportamiento sospechoso, puede alertar inmediatamente al responsable. Gracias a la IA, las organizaciones aumentarán significativamente su seguridad.
Perspectivas para RRHH y directivos
Los responsables de RRHH y los directivos pueden obtener información valiosa de las herramientas analíticas basadas en IA. Esta información les ayuda a tomar decisiones basadas en datos sobre la planificación de la plantilla, el desarrollo del talento y la gestión del rendimiento. La inteligencia artificial revela quiénes rinden más y quiénes tienen dificultades, y señala áreas de mejora para ambos. Gracias a esta tecnología del futuro, las organizaciones pueden optimizar sus estrategias de contratación y formación. Además, con los análisis basados en IA, los directivos pueden descubrir empleados con gran potencial e invertir en su desarrollo.
CleverControl y la puntuación de la IA
Un ejemplo de IA en la supervisión de empleados es la futura tecnología de CleverControl: AI Scoring. Esta innovadora herramienta va más allá de la simple recopilación de datos y proporciona una evaluación matizada de la productividad y el compromiso de los empleados.
La IA analiza partes de los datos recopilados por el software CleverControl, a saber, aplicaciones utilizadas, sitios web e información sobre el puesto del empleado y el sector de la empresa. Estos datos le permiten obtener una visión completa de la jornada laboral real del empleado y compararla con los valores de referencia del sector y del puesto. Como resultado, la IA puede señalar actividades improductivas o inusuales y pérdidas de concentración, y dar puntuaciones individuales de productividad.
AI Scoring no sólo ahorra tiempo al gestor en la revisión manual de los registros, sino que también proporciona una evaluación objetiva del trabajo de los empleados. Ayuda a los directivos a tomar decisiones basadas en datos sobre la distribución de la carga de trabajo, el reconocimiento del rendimiento y las áreas de mejora.
Más información sobre CleverControl y su función AI Scoring en Puntuación de la IA de CleverControl

Preocupación por la supervisión de los empleados mediante IA
Como vemos, la IA tiene un inmenso potencial en el seguimiento de los empleados, desde la automatización de las evaluaciones de rendimiento hasta la planificación de estrategias individuales de desarrollo de los empleados. Pero siempre existe la otra cara de la moneda.
Las organizaciones no deben dejar que el brillo de las ventajas de la IA las ciegue: la IA esconde algunos inconvenientes graves, a saber, la privacidad, la seguridad de los datos y la ética en la supervisión.
Las posibles violaciones de la privacidad y las brechas de seguridad son dos preocupaciones principales en relación con la IA en la supervisión de los empleados. Los sistemas de IA pueden recopilar y analizar grandes cantidades de datos de los empleados, incluida información personal, datos de correos electrónicos, plataformas de mensajería, videovigilancia e incluso pulsaciones de teclas. Pero no podemos dejar de preguntarnos hasta qué punto los empresarios pueden y deben vigilar a los empleados. Este nivel de vigilancia por IA puede resultar intrusivo para muchos empleados y minar su confianza.
Además, los enormes conjuntos de datos recopilados por los sistemas de vigilancia de IA son objetivos tentadores para los ciberataques. Una filtración de datos podría dejar al descubierto información sensible de los empleados y acarrear graves consecuencias, desde pérdidas económicas hasta robos de identidad.
Por decepcionante que resulte, todos somos parciales como seres humanos, y los directivos no son una excepción. Para evitar los prejuicios en la gestión de los empleados, las organizaciones pueden querer confiar en la IA, pero ¿es la IA realmente objetiva? Los algoritmos de IA se entrenan a partir de datos, y si estos datos están sesgados, el sistema de IA puede perpetuar e incluso amplificar esos prejuicios en su evaluación de los empleados. Como resultado, los empleados, especialmente los de grupos marginados, pueden ser tratados injustamente o discriminados.
Además, confiar demasiado en la supervisión de la IA puede reducir a los empleados a puntos de datos. No hace falta decir que un enfoque de este tipo descuida aspectos individuales del trabajo, como la creatividad, la colaboración y los patrones de trabajo preferidos personalmente.
La confianza se pierde en cubos y se recupera en gotas, por lo que los errores en la aplicación temprana de la tecnología tendrán una larga cola de implicaciones para la confianza de los empleados a lo largo del tiempo". dice David Johnson analista principal de Forrester Research".
Los posibles inconvenientes de la IA en la supervisión de los empleados pueden mitigarse con la colaboración de empresarios y empleados. La supervisión mediante IA no debe ser un secreto para los empleados: deben saber por qué se utiliza, qué datos se recopilan y cómo se utilizan y protegen.
Invitar a los empleados a participar en el proceso de toma de decisiones sobre la implantación de esta futura tecnología es una buena forma de establecer la confianza.
Las organizaciones no deben basarse únicamente en las valoraciones de la IA para evaluar el rendimiento. Las conclusiones de la IA deben combinarse con observaciones personales y opiniones de colegas; sólo estas evaluaciones del rendimiento pueden ser exhaustivas y objetivas. Por último, las prácticas de supervisión no deben ser estáticas. Los empleadores deben revisar periódicamente su eficacia, abordar las preocupaciones de los empleados y estar abiertos a realizar ajustes basados en la retroalimentación y en la evolución de las consideraciones éticas.
Conclusión
La IA es sin duda una tecnología de futuro que está llamada a revolucionar la supervisión de los empleados. Abre nuevas oportunidades para aumentar la productividad, mejorar el bienestar de los empleados, reforzar la seguridad de la empresa y ofrecer información valiosa a los directivos.
Sin embargo, como ocurre con cualquier tecnología potente, la integración de la IA en la supervisión de los empleados no está exenta de dificultades. Los problemas de privacidad, el potencial de sesgo algorítmico, la seguridad de los datos y la erosión de la confianza de los empleados son riesgos reales que deben abordarse de forma proactiva.
De cara al futuro, el éxito de la adopción de la IA en la supervisión de los empleados depende de un enfoque equilibrado y transparente. Las organizaciones deben dar prioridad a la comunicación abierta con los empleados, establecer políticas claras sobre el uso y la seguridad de los datos y garantizar que los conocimientos basados en la IA se utilicen para potenciar el elemento humano del trabajo, no para disminuirlo.